MASAJE HOLÍSTICO

Consiste en un conjunto de técnicas energéticas y manuales totalmente personalizadas en función de las necesidades, de cada usuario.

Sin lugar a dudas, el principal beneficio del masaje holístico es que reduce la ansiedad y el estrés. El terapeuta hace uso de aceites como el sándalo o la lavanda, que reducen la tensión, y llevan al cuerpo y a la mente a un profundo estado de calma.

Por supuesto, aumenta el nivel de energía. A todo ello hay que sumar que favorece la capacidad de atención y la concentración. Las terapias manuales mejoran la circulación sanguínea, de manera que la sangre llega mejor al cerebro. Esto se traduce en una mejor conexión de las ideas.

A nivel físico, el masaje holístico libera la rigidez muscular y reduce la tensión. Y, por último, cabe señalar que relaja el sistema nervioso, y es un gran ‘antídoto’ contra el insomnio. Los ingredientes para ayudar a conciliar el sueño son fabulosos: el masaje, la música relajante y los aceites esenciales.

Alcanzar el estado de relajación que permite el masaje holístico supone una mejora considerable en la calidad de vida. Son bien conocidos los efectos que el estrés crónico tiene en el sistema inmune: aumenta la presión arterial, favorece el desarrollo de enfermedades cardiovasculares…

Teniendo en cuenta que el estrés es una de las principales enfermedades del siglo XXI, la demanda de este tipo de masaje se ha disparado en los últimos años. Es maravilloso para desestresarse y liberar tensiones. Al finalizar la sesión los pacientes sienten una relajación plena, como si estuvieran caminando entre las nubes.

El masaje holístico conecta todos los aspectos que componen al ser humano: cuerpo, mente, alma y espíritu. Todos se contemplan como un todo, buscando alcanzar un equilibrio natural en zonas estratégicas en las que habitualmente se concentra la tensión, como el cuello, la espalda, la cabeza y los brazos.